Mama Tuberosa

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Aumento de pecho en mama tuberosa

Un pecho firme y elevado, con una técnica mínimamente invasiva.

Aumento de pecho en mama tubular

La mama tuberosa es una malformación congénita que se desarrolla durante el crecimiento de las mismas, en la adolescencia. Puede producir un profundo malestar físico y psíquico en la paciente, tanto que, en ocasiones, la operación de senos para la mama tuberosa se convertirá en su mejor aliada.

En Dorsia somos número 1 en cirugía de pecho y tenemos casi un centenar de clínicas por toda España y Andorra, para que elijas la más cercana a ti.

Paso a paso de la cirugía del aumento de pecho en mama tuberosa

  1. En Clínicas Dorsia contamos con un equipo de cirujanos plásticos reparadores que asesoran a la paciente escuchando el motivo de su consulta y resolviendo todo tipo de dudas o inquietudes acerca de los distintos grados de tuberosidad que existen.
  2. El cirujano estudiará en la consulta la forma de las mamas, el tamaño de la areola y pezón y el estado general de salud de la paciente para dar con el diagnostico adecuado. Posterior a este, se le explicará a la paciente el tipo de técnica quirúrgica a realizar con el fin de conseguir los mejores resultados.
  3. Se realiza una analítica preoperatoria según las prescripciones dadas por el cirujano. También puede ser recomendable verificar los estudios de imágenes existentes de ecografías y mamografías. Las exhaustivas pruebas preparatorias confirman si la paciente es apta o no para la intervención de cirugía de aumento de pecho en mamas tuberosas.
  4. Dependiendo del grado de deformidad de la mama, el cirujano utilizará una técnica u otra, adaptada a la paciente, para conseguir los mejores resultados. Se realiza una incisión en la areola -diseñada de forma que apenas se note- para remodelar su tamaño. También se redistribuye el volumen mamario y se coloca la mama en una posición correcta respecto a areola pezón.

ANTES Y DESPUÉS: MAMA TUBEROSA

Olvídate de los complejos por la forma y el tamaño de tu pecho. Consigue el volumen y la firmeza que tanto anhelas con nuestro aumento de pecho en mama tuberosa, que ofrece un resultado 100% natural, totalmente adaptado a la forma de tu cuerpo. ¿Estás lista para transformar tu pecho y tu vida?

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¿Tienes dudas?

nuestro equipo médico te las resuelve

Los especialistas en cirugía mamaria recomiendan esperar a la mayoría de edad para poder corregir esta pequeña malformación. Hay que asegurarse que la paciente ha finalizado su desarrollo hormonal y no sufre constantes variaciones de peso.

Los primeros días es normal que la paciente sienta molestias y su pecho se encuentre más inflamado de lo habitual. Algo normal que irá desapareciendo con el paso de los días y las semanas. Al igual que en un aumento de pecho, la paciente debe guardar reposo relativo los primeros días, evitar coger peso ni realizar movimientos bruscos que puedan afectar y dañar la zona.

Para saber con exactitud si sufres mama tuberosa tendrás que acudir a una cita de valoración y diagnóstico gratuita junto al equipo médico. Aun así, si tus mamas son alargadas y tus pezones miran hacia el suelo o tienes las areolas mucho más grandes con relación a tu pecho tienes muchas probabilidades de padecer esta irregularidad en tus senos.

Los resultados definitivos son visibles a partir de los 6 meses. Aunque desde el primer mes, una vez haya bajado la inflamación, se podrán observar los primeros resultados y sentir cómo tu pecho ha mejorado en volumen y forma. 

La talla final de tu pecho dependerá de los resultados que desees y de tu fisionomía. El cirujano examinará contigo el volumen, escote, proyección y forma de tu pecho para elegir la talla ideal para ti. 

En cuanto a la forma, existen las prótesis redondas (mismo volumen en la parte de arriba y abajo), ergonómicas (se adaptan a la forma de tu pecho) y anatómicas (forma de gota). 

En cuanto a la textura, pueden ser lisas, texturizadas o nanotexturizadas. 

Y en cuanto al peso, pueden ser ligeras o tradicionales. Las ligeras son un 30% más livianas que las prótesis de silicona tradicional. 

Sí. Es muy común que las pacientes presenten una asimetría en un único pecho y padezcan una mayor diferencia de volumen entre ambas.

Los primeros días sentirás molestias y es probable que tu pecho se encuentre más inflamado de lo habitual. Esta inflamación irá desapareciendo. Al igual que en un aumento de pecho, debes guardar reposo relativo los primeros días, evitar coger peso y realizar movimientos bruscos. 

Por supuesto. Gracias a los implantes mamarios se podrá corregir y remodelar la glándula del pecho de una forma natural y acorde a la figura de la paciente.

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Menos de una hora; y, además se realiza con una técnica ambulatoria que no requiere de hospitalización, por lo que el mismo día de la cirugía duermes en tu casa.  

Tras finalizar el proceso de recuperación y cicatrización, podrás observar que la cicatriz es prácticamente imperceptible. Los cortes que se realizan en el quirófano suelen ser lo más pequeños posibles -en la zona que hay debajo de la mama o alrededor del pezón-. 

Sí, la técnica AMI es un procedimiento mínimamente invasivo con el que mejorar la forma y el tamaño de los pechos de una forma precisa y con una pequeña incisión. Podrás retomar tu actividad habitual tras los primeros 3-4 días desde la intervención. 

Los resultados definitivos son visibles a partir de los 6 meses. Aunque desde el primer mes, una vez haya bajado la inflamación, se podrán observar los primeros resultados y sentir cómo tu pecho ha mejorado en volumen y forma. 

La talla final de tu pecho dependerá de los resultados que desees y de tu fisionomía. El cirujano examinará contigo el volumen, escote, proyección y forma de tu pecho para elegir la talla ideal para ti. 

En cuanto a la forma, existen las prótesis redondas (mismo volumen en la parte de arriba y abajo), ergonómicas (se adaptan a la forma de tu pecho) y anatómicas (forma de gota). 

En cuanto a la textura, pueden ser lisas, texturizadas o nanotexturizadas. 

Y en cuanto al peso, pueden ser ligeras o tradicionales. Las ligeras son un 30% más livianas que las prótesis de silicona tradicional. 

Son 100% definitivos. Aun así, hay que tener en cuenta que ciertos cambios en el cuerpo como la menopausia o el embarazo puede alterar tanto la forma como el volumen del pecho. Aunque nunca volverán a tener el tamaño inicial previo a la reducción. 

Los primeros días sentirás molestias y es probable que tu pecho se encuentre más inflamado de lo habitual. Esta inflamación irá desapareciendo. Al igual que en un aumento de pecho, debes guardar reposo relativo los primeros días, evitar coger peso y realizar movimientos bruscos. 

Si tus mamas son alargadas y tus pezones miran hacia el suelo o tienes las areolas mucho más grandes con relación a tu pecho tienes muchas probabilidades de padecer esta irregularidad en tus senos. Aun así, para saberlo con exactitud, debes acudir a una cita de valoración y diagnóstico con tu equipo médico.