Si te operas el pecho con nuestra técnica AMI, acelerarás tu proceso de recuperación y reducirás notablemente el riesgo de infecciones o contracturas capsulares; además de que no deja apenas cicatrices.

Por supuesto, ya que es una intervención mínimamente invasiva con la que mejoras el volumen, la firmeza y la forma de tu pecho con una pequeña incisión, que los médicos adaptan a tu pecho previamente.

Podrás volver a tu actividad habitual cuando pasen tres o cuatro días desde la intervención, siempre siguiendo las indicaciones de nuestros expertos.

La talla final dependerá de tu cuerpo y de los resultados que quieras obtener. Nuestro equipo analizará contigo el volumen, la proyección y la forma que deseas para elegir la talla idónea para ti.

A partir de los seis meses es cuando verás los resultados definitivos de tu aumento, una vez se haya ido por completo la inflamación y ya puedas disfrutar de tu pecho con su volumen y forma nuevos.